TRADICIONES CRIOLLAS:
“El que canta, manda” https://www.elperuano.pe/noticia/225066-el-que-canta-manda#
José Antonio Leturia recuerda las peculiaridades de los barrios criollos.
Sincero agradecimiento al reconocido periodista escritor Ernesto Carlin, del díario oficial el Peruano por el artículo “El que canta manda” en la sección cultural. (11/10/23). Les dejo el enlace.
TRADICIONES CRIOLLAS
El que canta, manda
José Antonio Leturia recuerda las peculiaridades de los barrios criollos.
11/10/2023 Se acerca el día de la canción criolla, y con él los recuerdos de tantas tradicionales jaranas. Y aunque uno haya sido arrullado con valses hasta de mañanita, siempre se cuelan algunos cambios entre las composiciones originales y sus versiones actuales.
Para solucionar dudas, nadie como don José Antonio Leturia, uno de los más acuciosos investigadores de valses y demás ritmos que marcaron la identidad de las urbes costeñas peruanas.
“En cada barrio se cantaba con distinto ritmo, lo que generaba que las guitarras y cajones se acoplaran al paso de los vocalistas”, relata al Diario Oficial El Peruano.
Una curiosidad que muchos desconocen. La forma de tocar el tradicional cajón no era uniforme como ahora.
El cajón que conocemos es más largo que ancho y el intérprete se suele sentar en él. “Hasta algunos lo mandan a hacer de acuerdo al tamaño de sus piernas”, relata Leturia.
Pero eso no se estandarizó hasta la década de 1950. Había de varias medidas, y algunos cajoneadores famosos colocaban el instrumento echado, en horizontal como Víctor “el Gancho” Arciniega.
Las curiosidades no quedan allí. Es el caso del famoso valse Anita. En peñas, fiestas y demás lugares de esparcimiento se canta “Y a los acordes de un modesto vals / La dicha entera te la brindaré”.
“No es entera, es eterna”, refiere el especialista basado en la letra original del Pablo Casas Padilla.
Y otra, que cruza la línea entre la literatura y la música. Cuando uno menciona la canción El pirata, ese que no quiere una tumba, una cruz ni corona, está sin proponérselo cambiando el nombre a un poema: Mar de sombras, del chalaco Luis Berninsone.
Asimismo, cada barrio tenía su estilo, según Leturia. En La Victoria era más asincopado, esto es, cambiaba de ritmo constantemente. El Callao y el Rímac tendían a lo jaranero, mientras que en Barrios Altos les gustaba los “picaditos”, ponerle algo más de velocidad a las canciones.
El ejemplo máximo de ese estilo es ese valse que dice Yo quiero que escuches la imagen de mi alma, que te ama y te adora como una ventura que nadie ha gozado, tu nombre quedará grabado para ser dichoso con tu falso amor.
Unos lo conocen como Falso amor, otros como Un suspiro, pero imposible no pensar en quien lo popularizó con ese particular estilo: Esther Granados, la de “Yo solita me jaraneo”.
Datos
La Asociación Felipe Pinglo Alva, que preside José Antonio Leturia, ha producido el disco compacto Latido criollo.
Está alistando una segunda entrega en la que se recuperará temas de antaño como uno del colombiano afincado en el Perú, Adolfo Chávez.
Dato
22 de octubre habrá un homenaje musical a Nedda Huambachano en el centro cultural Unión.
